Hay prácticas cotidianas en la cocina que no solemos tener en cuenta pero que representan un peligro para la salud. Cascar los huevos es el mejor ejemplo de ello porque, aunque no suele salir mal, esta actividad guarda un peligro latente que puede afectar el organismo.
A qué hora deberías comer huevo si querés aumentar tu masa muscularSacar un huevo de la bandeja. Cascarlo sobre la superficie de la mesada, sobre el borde de un bowl o una sartén o con un cuchillo. Terminar de abrir el huevo con las manos. Seguir cocinando. Ese suele ser el paso a paso cuando necesitamos incluir huevo en alguna receta. Si estás siguiend el procedimiento, hay algo que estás haciendo mal.
Por qué nunca romper los huevos en el borde de la sartén
El peligro de romper el huevo sobre cualquier superficie está asociado a las intoxicaciones alimentarias. Durante la puesta de la gallina, el huevo sale por el mismo canal que las heces del animal, por lo que su superficie puede estar contaminada. El principal peligro asociado a este alimento es la Salmonella, una bacteria que produce afecciones gastrointestinales.
Partir un huevo infectado sobre la mesada o el borde de cualquier recipiente contaminará los elementos de cocina. "En el momento en que lo cascas ya va a pasar a tener esos patógenos el lugar donde lo has cascado y luego, por ejemplo, tenemos las bacterias por toda la pileta y la cocina", explica el tecnólogo de alimentos Mario Sánchez.
Al separar la clara y la yema de la cáscara, lo primero que debemos hacer es lavar nuestras manos correctamente. Lo mismo aplica al utilizar un cuchillo para marcar la cáscara y partir el huevo.
Cómo debemos guardar los huevos correctamente
El Instituto de Estudios del Huevo es claro al respecto: los huevos se deben conservar en la heladera a una temperatura que ronde los 5ºC. Además, una vez puestos a esa temperatura, deben retirarse solo para cocinarse sin sufrir cambios de temperatura, o sea, sin pasar por la temperatura ambiente.
Otra condición para el guardado que se debe tener en cuenta es que, al ser un alimento crudo, no debe tener contacto con otros alimentos, mucho menos con los cocidos. Idealmente, tampoco deberían tocar las paredes separadoras de los contenedores. No es recomendable lavar los huevos porque su cáscara, aunque es resistente, es algo permeable y podemos arrastras las bacterias hacia su interior.